Lunes el 22, compramos un libro de poesía escrito por Rubén Darío, el poeta famoso nicaragüense. Queríamos leer su poesía con la idea que sus letras pudieran explicarnos el pueblo nicaragüense un poco mejor que nuestros ojos solos. El libro que compramos tiene por titulo, Prosas Profanas. Yo lo seleccioné por un poema se llama Canto de la Sangre. El poema se trata la sangre de Abél, de Cristo, de los mártires y suicidas. No lo leí completamente pero algo sobre su tema me echo una chispa de interés. Y entonces nos fuimos con el libro a comprar una botella de Flor de Caña.
Decidimos a parar por hambre en una fritanga a cenar antes de regresar al hotel. Mientras que tomamos bebidas esperando la comida, Penny tomó tiste (una mezcla de maíz y cacao) yo tomé cacao puro. Decidimos a leer un par de poemas mientras que estuvimos esperando la cena. No recuerdo tanto que leímos, pero cuando fuimos a pagar, el dueño del restaurante nos pidió a ver el libro.
El era un fanático de Rubén Darío. El nos contó sobre la vida del poeta, menciono que durante fiestas Rubén tiraba poemas como confite de una piñata. Nos dijo que al fin, la gente nicaragüense tiene tres puntos en que pueden competir enfrente cualquier nación; Poetas, Boxeadores, y Revolucionarios. Pero rápidamente el nos confesó que Ricardo Mayorga no representa los valores de Nicaragua, aunque admitió que pega duro.
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